MÓDULO FORMATIVO
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NÚMERO 3. PREPARACIÓN DEL ÁREA DE BAR-CAFETERÍA PREVIA AL SERVICIO
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ORIENTACIÓN PEDAGÓGICA
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OBJETIVO ESPECÍFICO: ANALIZAR EL FUNCIONAMIENTO
INTERNO DE SU ÁREA DE TRABAJO Y UTILIZAR ADECUADAMENTE LAS INSTALACIONES,
EQUIPOS Y HERRAMIENTAS NECESARIOS PARA LA PRESTACIÓN DEL SERVICIO. AYUDAS PEDAGÓGICAS U.D. 1: CURSO DE SERVICIOS HOSTELEROS (TÉCNICAS Y ORGANIZACIÓN, EDITORIAL PARANINFO,
TEMAS 1, 5, 6, 8, 9, Y 13). AYUDAS
PEDAGÓGICAS U.D 2: CURSO
COMPLETO DE SERVICIOS. EDITORIAL PARANINFO (TEMAS DEL 1 AL 4). CURSO DE
SERVICIOS HOSTELEROS, TÉCNICAS Y ORGANIZACIÓN. EDITORIAL PARANINFO, TOMO 1
(TEMAS 5, 8, 9, 13 Y 14).
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UNIDADES DIDÁCTICAS
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HORAS TEORIA
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HORAS PRACTICAS
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HORAS TOTALES
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Nº 1 LA CAFETERÍA
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2.30
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4
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6.30`
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Nº 2
MISE-EN-PLACE DEL BAR-CAFETERÍA
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5
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17
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22
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EVALUACIÓN
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HORAS EVALUACIÓN
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1.30
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CRITERIOS DE EVALUACIÓN:
ANALIZAR LAS RELACIONES INTERNAS DE LOS
ESTABLECIMIENTOS O ÁREAS DE ALIMENTOS Y BEBIDAS. DESCRIBIR LA ORGANIZACIÓN Y
FUNCIONES DE LOS DIFERENTES DEPARTAMENTOS HABITUALES EN UN ESTABLECIMIENTO DE
RESTAURACIÓN, DE FORMA QUE QUEDEN EXPLICADAS LAS RELACIONES INTERNAS DURANTE
EL SERVICIO. ELABORAR EL ORGANIGRAMA MÁS ADECUADO DE UN ESTABLECIMIENTO DE
RESTAURACIÓN, A PARTIR DE UNA DESCRIPCIÓN DE LAS FUNCIONES DESARROLLADAS EN
EL MISMO. CUMPLIMENTAR CORRECTAMENTE LOS FORMULARIOS E IMPRESOS HABITUALES EN
EL FUNCIONAMIENTO DE SU ÁREA DE TRABAJO. CONOCER EL FUNCIONAMIENTO Y
APLICACIONES DE LAS INSTALACIONES, EQUIPAMIENTOS E INSTRUMENTAL NECESARIO
PARA LA PRESTACIÓN DEL SERVICIO. DESCRIBIR LAS INSTALACIONES, EQUIPAMIENTOS E
INSTRUMENTAL NECESARIO PARA LA PRESTACIÓN DEL SERVICIO EN EL ESTABLECIMIENTO,
INDICANDO PARA QUE SIRVEN. CALCULAR ADECUADAMENTE LA DOTACIÓN NECESARIA PARA
EL ÁREA DE BAR-CAFETERÍA, DADO UN SUPUESTO DE UN ESTABLECIMIENTO DE ESTE
TIPO. UTILIZAR EQUIPOS, MÁQUINAS, ÚTILES Y HERRAMIENTAS NECESARIOS PARA LA
PRESTACIÓN DEL SERVICIO. REALIZAR LAS OPERACIONES NECESARIAS PARA EL USO Y
MANTENIMIENTO DE LAS INSTALACIONES, EQUIPAMIENTOS E INSTRUMENTAL NECESARIO
PARA LA PRESTACIÓN DEL SERVICIO. IDENTIFICAR LAS NORMATIVA TÉCNICA,
HIGIÉNICO-SANITARIA Y DE SEGURIDAD APLICABLE EN SU UTILIZACIÓN. CORRECTA
UTILIZACIÓN DE LA BANDEJA.
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HORAS TOTALES DEL
MÓDULO (SUMATORIO HORAS UNIDADES DIDÁCTICAS + HORAS EVALUACIÓN)
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30
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Módulos y Unidades Didácticas, con Objetivos, Tiempos y Criterios de Evaluación, del Curso de Camarero/a de Restaurante- Bar. Certificado de Profesionalidad del BOE 208 de 28 de agosto de 2009, disposición 13862, "Servicios de Restaurante", que en el mismo se establece, sustituyendo al "Certificado de Profesionalidad de la Ocupación de Camarero/a de Restaurante-Bar", del Real Decreto 302/1996 de 23 de febrero. BOE Nº 81 de 03 de Abril de 1996
martes, 9 de octubre de 2012
Módulo 3 - Preparación del Área de Cafetería-Bar, previa al servicio.
Etiquetas:
Barra,
Camarero/a,
Comportamiento,
Hostelería,
José Alberto López Truque,
Jugos,
Maquinaría,
Mise-en-place,
Uniformes
viernes, 5 de octubre de 2012
Módulo 2 UD 3 - Sentido de la Responsabilidad
En esta área hay actividades con incidencia en el medio ambiente. Limpieza de zonas comunes, habitaciones, orden en las instalaciones y recolección de desechos. Cuando la acción de limpieza es correcta el impacto ambiental es positivo. Por ejemplo:
• Una llave bien cerrada evita que se envíen al desagüe de cinco a diez litros de agua por minuto.
• La instalación de dispositivos de regulación del caudal de agua reduce de 8 a 20 litros el caudal de una llave.
Cuando la acción de limpieza es incorrecta el impacto ambiental es negativo. Por ejemplo:
Cada vez que se tira de la cadena de un excusado, 20 litros de agua van a parar a la red de alcantarillado. Un inodoro con escape de agua malgasta 34 mil litros al año.
• La limpieza de las zonas comunes asfaltadas mediante barredoras mecánicas, en lugar de manguera, disminuye considerablemente el consumo de agua en este tipo de limpieza.
• Es una buena práctica ambiental asegurarse de que la cantidad de agua empleada en la limpieza en general es la adecuada.
• Podemos instalar dispositivos limitadores de presión y difusores en lavabos y mangueras para asegurar un nivel de enjuague adecuado pero con menor aporte de agua.
• En las zonas de servicios comunes pueden instalarse llaves monomando con temporizador, de forma que se elimine la posibilidad de dejar las llaves abiertas.
• Se puede reducir el volumen de las cisternas del inodoro, manteniendo la eficacia de la acción limpiadora, mediante la introducción de botellas llenas de agua (o mejor de arena) o bajando el flotador.
• Otra solución consiste en sustituir las cisternas por otras de menor capacidad.
• En las cocinas, procurar la limpieza óptima de las verduras en baldes con agua.
Segregación de residuos.
• Fomentar medidas de recogida selectiva de residuos (papel, cartón, latas de aluminio, residuos orgánicos, residuos plásticos y vidrio) para su reciclado.
Energía.
• Si se usa la lavadora a medio llenar se consume mayor cantidad de agua, energía y detergentes.
• El termostato de la máquina debe mantenerse a temperaturas no muy elevadas, ya que el mayor consumo de energía se produce en el calentamiento de agua.
• En la cocina, los hornos y las hornillas deben limpiarse frecuentemente para evitar que la grasa impida la transmisión del calor.
• Vigilar los productos químicos que se emplean en la limpieza de las instalaciones y buscar los amigables con el medio ambiente.
• Al utilizar productos de limpieza se seguirán las recomendaciones del fabricante en cuanto a dosificación, para asegurar un consumo correcto y evitar contaminación.
• Las toallas y sábanas viejas se pueden reutilizar como trapos de limpieza. No se emplearán servilletas o rollos de papel para tal fin, pues aumentamos la cantidad de residuos generados.
Mantenimiento. Servicios.
En esta área encontramos las siguientes actividades con incidencia ambiental: mantenimiento de instalaciones, calefacción, aire acondicionado, equipos mecánicos y eléctricos.
Cuando la acción de mantenimiento es correcta el impacto ambiental es positivo. Por ejemplo:
Mantener limpias las bombillas y las lámparas permite un ahorro de hasta 10% de energía.
La sustitución de los sistemas de alumbrado tradicionales por sistemas de bajo consumo permite un ahorro de hasta 80% de energía.
Cuando la acción de mantenimiento es incorrecta el impacto ambiental es negativo. Por ejemplo:
Un mantenimiento incorrecto supone mayor consumo de energía y una disminución de la vida útil de los equipos, con lo cual generamos más residuos y más gastos en reparaciones.
Una calefacción en mal estado malgasta entre 30 y 50% de la energía que consume.
En caso de utilizar combustible líquido para la calefacción, se realizarán comprobaciones del nivel de los tanques de almacenamiento, tanto para controlar su consumo como para evitar posibles fugas y reducir la generación de residuos.
Una variación de un grado centígrado puede suponer en el consumo una diferencia de 6%. Debemos controlar la temperatura de la instalación, bajando si es necesario el termostato general, de manera que la calefacción en invierno no sea excesiva o la temperatura en verano demasiado baja.
Realizar controles en los termostatos individuales para evitar excesos en el consumo de energía.
La limpieza periódica de los filtros de los equipos de aire acondicionado asegura que el consumo energético no se dispare.
Es importante realizar una revisión regular de los equipos de aire acondicionado y de refrigeración para minimizar las emisiones a la atmósfera de los gases CFCs, que destruyen la capa de ozono.
Aislar térmicamente los edificios, y sobre todo las ventanas, lo cual permite un ahorro considerable de energía al evitar pérdidas de calor y frío.
Realizar inspecciones de la instalación de cañerías para detectar fugas y evitar mayor consumo de agua.
Una buena práctica para reducir el consumo eléctrico es la realización de revisiones del sistema. En ellas se determina el consumo de la instalación, los puntos calientes de iluminación, es decir, las zonas donde la iluminación artificial es más o menos necesaria. Realizar mediciones de consumo por zonas (cocinas, lavandería, restaurante, alberca, jardines y exteriores) ayuda a controlar el consumo de energía.
No es recomendable apagar los tubos fluorescentes en zonas donde vayamos a encenderlos en menos de cinco horas, ya que el mayor consumo de energía se produce en el encendido.
Aislar eficazmente, en las cocinas, las zonas frías de las zonas calientes permite ahorrar energía. Es importante que cierren herméticamente los refrigeradores, así como no introducir alimentos calientes en ellos.
El aceite usado de la maquinaria debe ser reciclado adecuadamente, ya que es un residuo muy contaminante. Un litro de aceite puede contaminar diez mil litros de agua.
Los tubos fluorescentes gastados o averiados son residuos tóxicos debido a su contenido de mercurio.
Definición de Residuos:
Se considera como residuo, cualquier sustancia u objeto del cual su poseedor se desprenda o del que tenga la intención u obligación de desprenderse, siempre que figure en el Catálogo Europeo de Residuos (C.E.R.).
Los residuos admiten varias clasificaciones, según su peligrosidad o su procedencia.
Según su peligrosidad:
• Residuos urbanos o municipales: incluyen los que se generan en los domicilios particulares, comercios, oficinas y servicios. Los que no sean peligrosos y puedan asimilarse a los anteriores lugares o actividades. Los que procedan de la limpieza de vías públicas, zonas verdes, áreas recreativas y playas. Los animales domésticos muertos, los muebles, enseres y vehículos abandonados. Los residuos y escombros de obras menores de construcción y reparación domiciliaria.
• Residuos peligrosos: incluyen a los que figuran en la lista de residuos peligrosos del Real Decreto 952/1997. Los recipientes y envases que los hayan contenido. Los que califique como peligrosos la normativa comunitaria, el Gobierno o estén incluidos como tales en los convenios internacionales de los que España forme parte.
• Residuos municipales: los generados en domicilios particulares, comercios, oficinas y servicios.
• Residuos industriales: los generados por la industria, independientemente de su peligrosidad o no.
• Residuos inertes: los que no sufren modificación en su estado o composición por interacción con el medio ambiente.
Para poder clasificar a un residuo como peligrosos existen dos vías:
• Si el residuo figura como tal en el Anejo 2 del Real Decreto 952/1997, es peligroso y no necesita para dicha calificación de ninguna analítica.
• Si el residuo no está incluido en el punto anterior es peligroso, sí y sólo sí.
* Está en la parte A de la tabla 3 del RD 952/1997 y además presenta una de las características de la tabla 5.
* Está en la parte B de la tabla 3, contiene alguno de las sustancias de la tabla 4 y además presenta una de las propiedades de la tabla 5 del RD 952/1997.
Diagrama
Residuos de la agricultura, horticultura, acuicultura, selvicultura, caza y pesca; residuos de la preparación y elaboración de alimentos. Residuos de la producción de bebidas alcohólicas y no alcohólicas (excepto café, té y cacao).
* Residuos de lavado, limpieza y reducción mecánica de materias primas. No peligroso
* Residuos de la destilación de alcoholes. No peligroso.
* Residuos del tratamiento químico. No peligroso
* Materiales inadecuados para el consumo o la elaboración. No peligroso
* Lodos del tratamiento in situ de afluentes. No peligroso
* Residuos no especificados en otra categoría. No peligroso
Residuos de la preparación y elaboración de frutas, hortalizas, cereales, aceites comestibles, cacao, café, té y tabaco; producción de conservas; producción de levadura y extracto de levadura, preparación y fermentación de melaza.
* Lodos de lavado, limpieza, pelado, centrifugado y separación. No peligroso
* Residuos de conservantes. No peligroso
* Residuos de la extracción con disolventes. No peligroso
* Materiales inadecuados para el consumo o la elaboración. No peligroso
* Lodos de tratamiento in situ de afluentes. No peligroso
* Residuos no especificados en otra categoría. No peligroso
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Hostelería,
José Alberto López Truque,
Manipulación de Alimentos,
Prevención de Riesgos Laborales
miércoles, 3 de octubre de 2012
Módulo 2 UD 2.1 Primeros Auxilios
Una
de las materias de gran importancia para el empleado es la de “Primeros
auxilios”. Aunque en realidad hay muy pocas personas que los conozcan, bien por
falta de medios, de tiempo o interés, debemos pensar que su conocimiento y su
práctica pueden salvar muchas vidas humanas; no olvidemos la cantidad de
accidentes ocurridos en la calle o en el trabajo. Todos podemos ayudar si
estamos preparados. ¡Cuántas vidas se podrán salvar con la intervención a
tiempo de un entendido en la materia!. (LO IDEAL, SERÍA REALIZAR UN CURSO DE PRIMEROS AUXILIOS, DE LOS QUE ORGANIZA CRUZ ROJA.)
El
conocimiento de los primeros auxilios puede hacer disminuir el sufrimiento y el
dolor del accidentado. Puede Salvar la vida de un semejante y además facilita
la posterior intervención del médico.
Debemos
entender por primeros auxilios los cuidados y atenciones inmediatas que se
proporcionan a quien ha sufrido un accidente, con el fin de aliviar su
sufrimiento y dolor, evitando consecuencias posteriores irreparables.
Para
la aplicación de los primeros auxilios se deberán seguir unas normas básicas y
fundamentales que podríamos dividir en dos grandes grupos: en el primero,
incluiremos todas aquéllas que deberá observar la persona que va a prestar sus
servicios. Son las siguientes:
Actuar rápidamente, con
serenidad y seguridad.
Tranquilizar y dar ánimos al
accidentado.
Manejar al accidentado con
precaución, evitando desplazarle del lugar del accidente, a no ser que sea un
punto peligroso tanto para él como para las personas que van a intentar
ayudarle
Hacer un reconocimiento general,
mediante el cual se pueden recopilar datos para determinar las consecuencias
(fracturas, quemaduras, hemorragias, etc.).
Una de las primeras acciones
será vigilar la respiración y las posibles hemorragias.
Tumbar al herido en el suelo,
sobre un costado, con la cabeza inclinada hacia atrás o hacia un lado.
No dar de beber jamás en caso de
que el accidentado haya perdido el conocimiento.
En el segundo
grupo incluiremos las normas a seguir por el accidentado, si bien su actitud
será normalmente pasiva en espera de ser auxiliado:
Conservará en todo momento la
calma, seguridad y tranquilidad.
Se dejará reconocer sin poner
obstáculo alguno.
No ocasionará problemas que
puedan retrasa la aplicación de los servicios que se le vayan a prestar.
Cooperará en todo lo posible,
haciendo lo que se le indique.
Una vez prestados los primeros
auxilios, se trasladará al herido al centro sanitario más próximo y, si es
factible, se avisará al centro con anterioridad, a fin de que se vayan haciendo
los preparativos necesarios para su atención. Tal es el caso de las
intervenciones quirúrgicas, por ejemplo.
No
debemos olvidar que los primeros auxilios se deben practicar en los momentos
que anteceden a la llegada del médico. Esos instantes pueden tener una vital
importancia para el accidentado. Los
casos más frecuentes de accidentes en el trabajo se pueden agrupar en la
siguiente forma:
QUEMADURAS
LUXACIONES
INFECCIONES
“SHOCKS” TRAUMÁTICOS
CUERPOS ESTRAÑOS EN LOS OJOS
DESCARGAS ELÉCTRICAS
CONTUSIONES
HERIDAS
FRACTURAS
HEMORRAGIAS
Existen también otros tipos de
accidentes, condicionados a la zona donde esté situada la empresa, como: la
congelación en casos de restaurantes u hoteles de alta montaña, y la insolación
que puede producirse en empresas hoteleras situadas en zonas muy cálidas.
Hemos
mencionado las causas más frecuentes de los accidentes. Vamos a estudiar los
efectos y el tratamiento adecuado.
* CONTUSIONES
Es este tipo de accidentes uno
de los más frecuentes. La piel no pierde su continuidad, pero las molestias o
roturas se producen en el interior, por golpes y caídas. Es característico en
este tipo de lesiones la inflamación local y la aparición de una mancha rojiza
ocasionada por la rotura de los vasos sanguíneos; el dolor se presenta
inmediatamente. El tratamiento que se debe
aplicar lo antes posible es el de bolsas de hielo o compresas frías en las
zonas o partes lesionadas; también es conveniente colocar la zona afectada en
reposo. Debemos decir que las contusiones pueden ser indicio de una lesión de
mayor gravedad.
* HERIDAS
Se producen cuando la piel
pierde la continuidad, llamándose herida precisamente a la zona abierta. Las
heridas pueden originar posteriores complicaciones como el “shock”, o bien por
un mal tratamiento, pueden ser la causa de infecciones. Las heridas profundas
ocasionan las hemorragias.
Podemos clasificar las heridas en:
* Contusas
* Incisas
* Punzantes
Heridas contusas, son las producidas por golpes
que, además de romper la piel, originan la inflamación de la zona accidentada.
Ejemplo de este caso sería el golpe dado con un martillo, que además de la
contusión, produce la herida.
Heridas Incisas, las que se producen mediante un corte sin lesionar la zona contigua. Caso típico de estas heridas son los cortes producidos por cuchillos, donde se puede apreciar el corte limpio, o lo que es igual, sin contusiones.
Heridas Punzantes, son las que se producen a través de los tejidos, traspasando la epidermis y dermis hasta llegar al músculo o hueso en algunos casos; suele ocurrir este tipo de herida con objetos puntiagudos y largos.
El tratamiento a
seguir en todas ellas es muy variado, según el caso, a excepción de las que
producen hemorragias. En términos generales, actuaremos de la siguiente forma:
En primer lugar se limpiará la
zona afectada con agua oxigenada o alcohol con gasas esterilizadas, para evitar
posibles infecciones.
A continuación se examinará la
herida y se observará si ha quedado algún cuerpo extraño en su interior, como
puede ser cristal, metal, etcétera. En este caso, se extraerá con unas pinzas
desinfectadas con alcohol, hervidas o al fuego de una llama.
En caso de ser heridas con
bastante derramamiento de sangre, pero sin llegar a la hemorragia, se aplicará
un hemostático, dejándolo sobre la zona accidentada hasta que ésta deje de
sangrar.
Volver a limpiar la herida y
aplicar un apósito o vendaje. En todos aquellos casos en que la profundidad o
extensión de la misma sea considerable, se llevará al paciente hasta la
enfermería de la empresa o centro médico más cercano, donde se le darán algunos
puntos de sutura.
Siempre que la herida haya sido
producida por algún objeto sucio u oxidado, se tendrá mayor cuidado, debiendo
observar, además de las normas anteriormente citadas, precauciones contra
posibles infecciones tetánicas, por lo que se pondrá en conocimiento del médico
con el fin de tomar medidas preventivas o a la administración de vacunas a tal
fin destinadas.
* FRACTURAS
Se entienden por fracturas la
rotura de cualquier hueso y se dividen en dos tipos:
Fracturas cerradas
Fracturas abiertas
Fracturas cerradas son aquéllas en las que la piel que cubre el hueso fracturado o roto
permanece intacta, siendo éste el motivo por el cual se hace imprescindible la
utilización de rayos X para determinar el lugar exacto de la misma.
Fracturas Abiertas son aquéllas en las cuales el hueso perfora los músculos y la piel,
aflorando al exterior. Este tipo de fracturas es mucho más difícil de tratar
por los peligros que implica: infecciones, roturas de fibras musculares, etc.
Existen unos síntomas
inconfundibles para diagnosticar las fracturas, entre otros:
Deformación y amoratamiento de
la zona accidentada.
Intenso dolor.
“Shock”.
Imposibilidad de realizar
movimientos con el miembro donde se encuentra el hueso fracturado.
En las fracturas abiertas se
producen, además, hemorragias y pequeños astillamientos del hueso fracturado.
El tratamiento que se debe
seguir en este tipo de accidentes es bastante sencillo. En primer lugar, se
realizará un reconocimiento al accidentado pero sin que éste cambie de postura,
ya que en lugar de favorecer al lesionado, se le puede ocasionar daños de mayor
importancia, debido a que el hueso roto puede producir lesiones en los
músculos, fibras y venas, de tal forma que una fractura cerrada puede ocasionar
una fractura abierta.
Una vez realizado el
reconocimiento, lo primero que se debe hacer es inmovilizar el miembro
afectado, utilizando para ello un vendaje. La forma correcta de realizar este
vendaje será la siguiente: tomar unas tablas o planchas de metal que cubran la
zona del hueso afectado, poniéndolas a los lados para inutilizar la zona, e
incluso la articulación más inmediata, anulando todo movimiento; estas tablas,
que reciben el nombre técnico de “férulas”, se ajustan al cuerpo mediante una
venda levemente apretada, pues en caso contrario produciría el corte del riego
sanguíneo.
Por último, deberemos decir que las fracturas más peligrosas son las
del cuello, vértebras cervicales y las de columna vertebral. Como consecuencia
de las mismas pueden producirse la paralización de varios miembros, como los
brazos y piernas, o bien la mitad del cuerpo (ejemplo: la paralización desde la
cintura a los pies), aparte de llegar a producir la muerte. Es importante no
mover en ningún momento al accidentado y esperar la asistencia medica de
urgencias.
* HEMORRAGIAS
Se entiende por este nombre toda
pérdida de sangre, que tenga cierta importancia, aunque en realidad deberíamos
decir que es toda emanación de sangre fuera de su conducto normal. Como
principio básico señalaremos que toda hemorragia tiene su importancia, llegando
a ser en la mayoría de los casos de considerable gravedad. Clasificaremos las
hemorragias en:
Internas
Externas
Pero éstas, a su vez, se
subdividen en otros dos grupos, de acuerdo con el conducto del que fluye la
sangre. Son las siguientes:
Venosas
Arteriales
Hemorragias internas o externas son aquéllas que se producen por algún
trastorno del organismo interno y en las que a simple vista no se aprecia
ninguna pérdida de sangre; como caso típico tenemos las producidas por la
perforación de estómago o úlceras del mismo; mientras que en las externas se
aprecia la pérdida de sangre a simple vista, como ocurre con las ocasionadas
por cualquier elemento cortante: cuchillo, cristal, etc.
Las hemorragias de origen venoso o arterial son fáciles de distinguir a
simple vista, pues tienen características totalmente dispares. En las de origen
venoso, la sangre mana lentamente y tiene un color rojizo oscuro, mientras que
en las arteriales la sangre es de color rojo intenso y mana a borbotones o
intermitentemente.
Como tratamiento de las hemorragias aplicaremos presión sobre la zona herida, procurando mantener en postura elevada el miembro dañado; se aplicará, después de haber limpiado la zona, una compresa o gasa esterilizada, para evitar posibles infecciones, colocando a continuación un vendaje, sin oprimir excesivamente la herida.
El torniquete se aplicara en los
casos de hemorragia
En aquellos casos en que, a pesar de la compresión, continúe la
hemorragia, se recomienda aplicar un torniquete, ya que por este sistema la
compresión es mucho mayor, rebajando la cantidad de sangre que se pierde. El
torniquete se aplicará en los casos de hemorragia venosa, a unos centímetros
por debajo de la herida, mientras que si fuera arterial, se aplicaría por
encima. Para hacer el torniquete, se puede utilizar una goma elástica, un
pañuelo, corbata o cualquier tejido de que se disponga; se harán una serie de
nudos o trenzado, sujetándolo al final con un elemento que no permita que se
desenrolle; dicho elemento puede ser un palo, regla, bolígrafo, etc., haciendo
a continuación un nudo. El torniquete no puede estar aplicado durante mucho
tiempo, pues al no fluir la sangre normalmente, se puede producir gangrena, por
lo que se deberá aflojar durante unos instantes cada diez minutos.
Al hacer el torniquete, se
anotará la hora en que se aplicó y se vigilará constantemente; en caso de que
la sangre no mane de nuevo, se quitará, sin volver a aplicar.
* QUEMADURAS
Con este nombre deberemos
entender las lesiones producidas por la descomposición de tejidos orgánicos
debido a la acción de calor intenso o de líquidos corrosivos, como pueden ser
los ácidos, o las descargas eléctricas en el organismo de una persona.
Hay dos factores primordiales a
tener en cuenta en las quemaduras; su grado y extensión. El grado es el factor
que dará importancia en cuanto a posibles pérdidas o inutilizaciones, y la
extensión será el factor que más influya en la gravedad del paciente; así pues,
será de mucha más gravedad una quemadura de menor grado y mayor extensión, que
al contrario.
Las quemaduras se clasifican en:
Primer grado
Segundo grado
Tercer grado
Las quemaduras de primer grado tienen como característica principal el
enrojecimiento de la piel con inflamación; la lesión no pasa de la parte
externa de la piel o epidermis.
Las quemaduras de segundo grado son aquéllas en las que la lesión llega
hasta la parte interna de la piel o dermis y se caracterizan por la aparición
de pequeñas vejigas o ampollas con un líquido interno llamado plasma.
Las quemaduras de tercer grado se forman cuando la lesión llega a los tejidos
que se encuentran debajo de la piel, como son músculos, tendones, etcétera.
El tratamiento a seguir en este
tipo de accidentes es parecido al de las heridas; lo primero que se hará es
limpiar o desinfectar la zona quemada, retirar el sobrante del tejido no
quemado cortando con tijeras y aplicar suficiente agua. Una vez realizado esto,
se pondrá una gasa esterilizada o un vendaje. Deberá tenerse en cuenta que no
es conveniente reventar las ampollas que se formen, pues de hacerlo, son
núcleos de posibles infecciones o complicaciones.
Uno de los productos que más
peligrosas quemaduras produce son los ácidos. Normalmente son dolorosas y de
gravedad. Su tratamiento difiere en algo de los demás, y sobre todo en lo
referente a la limpieza de la zona, que en este caso se deberá limpiar con agua
en abundancia, aplicando posteriormente una solución de bicarbonato sódico o de
cualquier producto alcalino. Las quemaduras producidas por la sosa se lavarán,
en lugar de con agua, con vinagre. Es importante recordar que tras la
aplicación de los primeros auxilios en las quemaduras de segundo y tercer
grado, se debe trasladar urgentemente al accidentado al centro médico.
* LUXACIONES
Se aplica este nombre a las
lesiones producidas por la salida o descolocación del hueso de su sitio en las
articulaciones. Hay dos tipos de luxaciones:
Cuando el extremo del hueso se
sale totalmente del lugar que le corresponde a la articulación. Este caso
recibe el nombre de “luxación completa”.
Cuando el hueso se separa
parcialmente de la articulación, se conoce como una “subluxación”.
Las luxaciones que se presentan
más fácilmente son las que se producen en las articulaciones de las siguientes
partes del cuerpo:
Hombro
Codo
Cadera
Rodilla
Dedos y muñeca
Tobillo
Las luxaciones vienen precedidas
de los esguinces, que son desgarros de ligamentos producidos al forzar el
movimiento de la articulación; este desgarro de tendones o ligamentos deja
debilitada la articulación, produciéndose la luxación con otro movimiento
brusco.
Los síntomas apreciados en este
caso serán los siguientes:
Desviación del eje normal del
miembro.
Deformidad de la articulación.
Dolores acusados, localizados en
la articulación lesionada.
Alargamiento o acortamiento de
la articulación.
Disminución en la movilidad de
la articulación.
En este tipo de accidente, la función de la persona que aplicará los
primeros auxilios queda reducida a la simple acción de inmovilizar, por el
mismo procedimiento que en las fracturas, la zona afectada, y llevar al herido
al centro de asistencial más próximo.
* INFECCIONES
Es el desarrollo de gérmenes
nocivos en una herida, por lo que se recomienda la utilización de gasas
esterilizadas y productos farmacéuticos desinfectantes en la limpieza y cura de
las heridas.
La infección también puede ser
producida al ingerir productos en malas condiciones, portadores de gérmenes
nocivos, o bien por la introducción de algún elemento extraño que trastoca el
funcionamiento ordinario del organismo.
La sintomatología de las
infecciones es muy fácil de distinguir, pues se van produciendo lenta y
paulatinamente, y nunca se presentan de una forma brusca o rápida. Sus
principales síntomas son:
Un dolor intenso al principio
que, pasado al tiempo, se convierte en dolor intermitente y en forma de
pinchazos.
Enrojecimiento del lugar
afectado.
Elevación de la temperatura
corporal.
Formación de pus en las heridas.
El tratamiento primordial será
observar la mayor limpieza, lavándose bien las manos con jabón y agua y
siguiendo las instrucciones que se mencionan a continuación:
Limpiar perfectamente la herida
con una gasa esterilizada.
Seguir siempre la norma de ir
del centro hacia los bordes, y no al contrario, pues produciría daños
imprevisibles.
Aplicar mercromina-betadine, sobre la
herida y poner a continuación una gasa esterilizada, sujetándola con
esparadrapo.
Una de las infecciones más
peligrosas que existe es la tetánica. Se produce por elementos oxidados o que
se encuentran en lugares de desperdicios y basuras, o por contacto animal. Por
ello, se debe recurrir inmediatamente al médico para que examine al accidentado
y le vacune contra este tipo de infección, que puede producir la muerte en muy
poco tiempo.
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